(EL DIA, 31 de marzo)
Según políticos y analistas, el afán desarrollista de Evo Morales pudo más que la defensa y respeto de la Pachamama. Para otros, solo se quitó la máscara y así dar continuidad con el extractivismo, contrario a su posición ideológica.
En 13 años de gobierno de Evo Morales, la reciente aprobación del uso pleno de la semilla transgénica HB4 resistente a la sequía, exclusivamente en la producción de soya para producir biodiesel, según analistas, fue el giro de 180 grados que contradice de plano su larga postura en la defensa de la Madre Tierra (Pachamama) y respeto al medio ambiente, instrumento discursivo en foros y eventos internacionales. Otros fundamentan, sin embargo la
línea "desarrollista", contraria a una posición progresista fue
adoptada a partir de 2010 e instrumentada de manera notoria en esa
ruptura con los pueblos indígenas del TIPNIS, el 2011.